La felicidad es algo que todos deseamos, y muchas personas son capaces de lograrlo. Pero para alcanzar la felicidad, debemos darnos cuenta que es importante el satisfacer las necesidades físicas, emocionales y espirituales que tenemos como seres humanos.
En el área física tenemos que darnos cuenta de que algunos de los problemas y dolencias que se sufren no se pueden evitar, pero gran parte de la salud física tiene que ver con lo bien que has cuidado de su cuerpo. Para lograr un cuerpo sano, debemos comer alimentos nutritivos, beber mucha agua, y obtener una cantidad adecuada de sueño y ejercicio.
La felicidad emocional y espiritual es tan importante como el bienestar físico. El logro de la felicidad espiritual y emocional se basa en nuestra relación con los demás, nuestra relación consigo mismo y nuestra relación con Dios. Jesucristo dijo " yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia" (Juan 10:10). Esta vida abundante es para ahora y por toda la eternidad.
Es el deseo de Dios que todos sus hijos tengan una vida llena de paz y gozo a pesar de las circunstancias que nos rodeen. Las siguientes sugerencias te ayudarán a examinar tu vida y hacer los arreglos necesarios para vivir una vida de plenitud en Dios.
Comienza enumerando tus bendiciones. No importa cuántas dificultades tengas, enfócate en tus bendiciones en vez de sus problemas. El pensar solamente en los problemas en la vida tiende a proyectar una sombra que solo trae depresión. Toma unos minutos de cada día para reflexionar acerca de todas las cosas por las cuales tienes que estar agradecido en la vida.
Concéntrate en tu fe. Nuestra fe en Dios nos ayuda cuando la vida se pone difícil. Al nosotros concentrarnos en nuestra fe y dar nuestras sus cargas a Dios para que las maneje, encontrarás consuelo, alivio y fortaleza espiritual.
Perdona. Este es uno de los puntos más importantes. Diariamente tenemos la oportunidad de ser ofendidos por alguien, pero haz la decisión que antes que la ofensa ocurra ya has perdonado al individuo. Aprende a perdonar a los demás, y también a ti mismo.
Se caritativo y aprende a dar de ti mismo. Las personas que dan de su tiempo y esfuerzo a distintas causas sienten que están haciendo una diferencia en el mundo. Esta gratificación les llena de vigor en sus vidas personales y afecta su personalidad de forma positiva.
Dale lugar a las relaciones personales que tienes en lugar del materialismo. Recuerda que hemos venido a este mundo sin nada y nos vamos sin nada. Asegúrate de mostrarle a tus seres queridos el amor que sientes hacia ellos. Ellos son más importante que cualquier cosa material.
¿Desea nuestra ayuda para desarrollarse espiritualmente? Tenemos personas que desean asistirlo en ese proceso y solamente tiene que llenar el formulario. Nuestra ayuda es gratuita y deseamos cooperar en su proceso de conocer a Dios y Su Palabra.