Todos hemos experimentados malos tiempos ya bien tarde o temprano. Tal vez han sido una cuenta bancaria vacía, un niño enfermo, un matrimonio roto, en fin, estas tormentas que se presentan en el transcurso de nuestras vidas te dejan preguntando y tratando de analizar como es posible que esto haya sucedido.
Te tengo buenas noticias. No estás solo en estos momentos, Dios está a tu lado y desea transformar tu situación. Tal vez no sabes cómo va a llegar la respuesta, no sabes la solución, pero la Palabra de Dios nos muestra exactamente cómo hacerlo.
En primer lugar, debemos darnos cuenta de que las pruebas de la vida llegan a todos y cada uno de nosotros. En algún momento u otro, los tiempos difíciles van a venir. Jesucristo nos dice en Juan 16:33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
Lamentablemente, muchas personas confían en sus emociones y permiten que estos momentos difíciles les traigan dudas acerca de lo que creen que Dios dice en vez de confiar en la Palabra de Dios la cual les traerá la estabilidad necesaria para hacerle frente al mal momento y triunfar en él. La Palabra de Dios es el ancla de nuestras vidas que no permite que seamos destruidos por cualquier tipo de tormenta que venga a nuestro camino. En ella, Dios nos revela su voluntad de bendecirnos, protegernos y cuidarnos en todo momento.
Tal vez tú eres uno de ellos que se encuentran en medio de esta tormenta, pero si hay algo importante de recordar es que tú estás de paso. ¡No vas a acampar en ella! Simplemente seguirás tu camino, confiando en Dios, sabiendo que Él no te abandonará y ni te dejará a la deriva. Sigue caminando y sal de esta tormenta porque tu destino te está esperando al otro lado de esta tormenta.
Nuestra lucha es una de fe, pero Dios nos da la fortaleza requerida si no nos desanimamos. Confía en Dios, en lo que ya Él ha revelado en su Palabra y ten fe en Él. No te olvides lo que dice en el Salmo 23:4 Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo.
¿Desea nuestra ayuda para desarrollarse espiritualmente? Tenemos personas que desean asistirlo en ese proceso y solamente tiene que llenar el formulario. Nuestra ayuda es gratuita y deseamos cooperar en su proceso de conocer a Dios y Su Palabra.